El grifo del Museo dell’Opera del Duomo de Pisa

15 noviembre 2020

 

En enero de 2020 en AntiguoRincon visitamos la exposición temporal «Las artes del metal en Al-Ándalus» organizada por el Museo Arqueológico Nacional de Madrid, y podemos constatar que una escultura llamó especialmente la atención de las y los visitantes. Se trataba de la copia de uno de los bronces zoomorfos islámicos más conocidos: el grifo del Duomo de Pisa.

 

 

Actualmente la escultura se conserva en el Museo dell’Opera del Duomo di Pisa. Hasta el año 1828 el bronce estaba ubicado en el punto más alto del tímpano oriental de la catedral de Pisa. En los años treinta del siglo XX, con el objetivo de preservar la pieza, se decidió sustituirla por una copia y conservar el original en el museo.

 

Hasta la fecha la escultura del grifo de Pisa representa la mayor escultura de bronce conocida de época medieval de producción de talleres islámicos. El grifo se presenta con una altura de más de un metro. La superficie cuenta con decoraciones en varias zonas y tres inscripciones. Una cubierta diseñada con círculos concéntricos cubre la parte posterior del grifo mientras que la parte superior de las patas termina en forma de lágrima y está decorada con leones y águilas rodeados por motivos vegetales.

En origen se creía que la escultura pudiera tener una procedencia fatimí. A mediados del siglo pasado se empezó a hipotizar que se hubiera podido realizar en Al-Ándalus con mano de obra persa. Hoy en día se han identificado otras características histórico-artísticas que hacen pensar a la comunidad científica que probablemente el grifo fue realizado en un taller en Al-Ándalus.

 

Según las fuentes el grifo llegó a Pisa como botín de guerra, posiblemente en una de sus incursiones en las Islas Baleares o como parte del saqueo de Almería en el 1089. Hoy en día hay una corriente de estudiosos y estudiosas que es propensa a pensar que el grifo llegó a Pisa como ofrenda dentro uno de los numerosos tratados comerciales que la república marinera concordó con alguna taifa.

Una de las peculiaridades del grifo de Pisa, además de su historia y decoración, es su función. Hoy en día todas las investigaciones concuerdan en que el bronce no era solo una escultura, en origen debería haber albergado en su interior un mecanismo que le permitiera emitir sonidos. En el interior de la escultura se puede apreciar un contenedor en forma de globo que según la mayoría de las investigaciones formaba parte de un mecanismo parecido al sistema de una gaita, permitiendo al bronce imitar un sonido parecido a un rugido. Esta teoría estaría confirmada por fuentes escritas. Liutprando describe la corte de Bizancio en el año 949 y haciendo referencia al trono de Constantino VII Porfirogénito describe la presencia de leones de bronce o de madera dorada que rugían cochando la cola contra el suelo.

 

Sea cual fuere su origen o el motivo por el que se realizó la escultura, es destacable que haya perdurado en el tiempo hasta nuestros días permitiéndonos apreciar el arte de los metales de los orfebres de Al-Ándalus en la Edad Media.

 

Para saber más: https://archeoandrea.com/las-artes-del-metal-en-al-andalus/

 

Andrea Vincenti.

Arqueólogo y cooperante. Viajero y Knowmad.